miércoles, 11 de julio de 2012

una mujer en Marte?


La nave sonda Spirit, de la Nasa, fué lanzada hacia el planeta Marte en el año 2003. El 3 de enero de 2008, el vehículo rover spirit dió a conocer esta fotografía, que recoge una zona marciana conocida como West Valley.

Aunque al principio pasó inadvertido, más tarde los investigadores independientes que rastrean cada toma marciana, detectaron la presencia de un elemento anómalo en el lateral izquierdo de la imagen. Parecía como que un ser vivo y de aspecto humano, o humanoide, andaba por allí tranquilamente.

Tanto los científicos como los escépticos, sobrepasados por la misteriosa imagen, recurrieron tanto a la negación como al llamado fenómeno óptico de la pareidolia para intentar desatender el innegable registro de Spirit, y concluir que se trata de un objeto inerte. La negación siempre tiene prisa; pasa por encima de la ciencia y no necesita prudencia ni paciencia.

Por lo que revela la propia imagen, parece que el ser de Marte levanta su brazo derecho en un gesto que todavía no ha podido ser interpretado.

Al principio se habló del ser de Marte, o del hombre de Marte, pero una observación más detallada, a lo largo del tiempo, pareció mostrar que este supuesto ser, en realidad se trataría de una mujer, ya que sorprendentemente presenta una forma más bien femenina, con lo que parece que son caderas ensanchadas, piernas femeninas, pecho femenino y cabello largo. ¡Cuanto menos es extraordinario!...

También podría caber otra posibilidad, igualmente desconcertante. Y es que podría tratarse de una escultura, una especie de estatua de Venus, que tiene un significado determinado, y que por circunstancias, se halla en ese lugar.

Realmente, y al margen de esa toma de la Spirit en Marte, las imágenes de la Nasa no se difunden al público según van llegando a la Tierra, como algún ingenuo pudiera pensar, sino que primero tienen que pasar unos estrictos controles de supervisión y aprobación oficial. Todo el material de la Nasa es archivo militar y requiere permisos gubernamentales.

De hecho la mayoría o todas las imágenes Nasa de Marte, normalmente son traqueteadas con programas automáticos, o manipuladas expresamente, como es el caso de la segunda toma de la Cara de Marte de 1998, supuestamente fotografiada por la MGS, que no se parecía en nada al registro original Viking de 1976.

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